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Nuestra Señora de Guadalupe(1)

Zoey Maraist | Catholic Herald Staff Writer

Astrid Meléndez ora antes de la misa de la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe en la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles en Woodbridge el 11 de diciembre. ZOEY MARAIST | HERALDO CATÓLICO

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El obispo Michael F.Burbidge bendice el altar con incienso en la Misa de la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe en la Iglesia Our Lady of Angels en Woodbridge el 11 de diciembre. ZOEY MARAIST | HERALDO CATÓLICO

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El obispo Michael F.Burbidge bendice la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe en la Misa de la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe en la Iglesia Our Lady of Angels en Woodbridge el 11 de diciembre. ZOEY MARAIST | HERALDO CATÓLICO

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El obispo Michael F.Burbidge saluda a un bebé vestido como San Juan Diego después de la misa de la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe en la iglesia Our Lady of Angels en Woodbridge el 11 de diciembre. ZOEY MARAIST | HERALDO CATÓLICO

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Los católicos hispanos del norte de Virginia suelen celebrar la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe el 12 de diciembre con festividades parroquiales que incluyen música de mariachis, bailes tradicionales y mucha comida mexicana. Pero este año, la pandemia de coronavirus paralizo muchas celebraciones para la patrona de las Américas. El obispo Michael F.Burbidge celebró una misa de vigilia para una pequeña multitud en la iglesia Our Lady of Angels en Woodbridge el 11 de diciembre.

En la homilía de los Discípulos de los Corazones de Jesús y María, el Padre Álvaro Montero, párroco de Nuestra Señora de los Ángeles, habló sobre la famosa aparición mariana. En 1531, la Virgen María se apareció a un azteca llamado Juan Diego y le pidió que construyera una iglesia en el cerro Tepeyac. Cuando el obispo le pidió a Juan Diego que mostrara pruebas de la solicitud, Nuestra Señora le dijo a Juan Diego que recogiera rosas, que encontró creciendo fuera de temporada. Cuando Juan Diego abrió su tilma para mostrarle las flores al obispo, una imagen, ahora conocida como Nuestra Señora de Guadalupe, estaba impresa en su ropa.

El padre Montero dijo en español que el mensaje de Nuestra Señora de Guadalupe habla de la importancia de recibir a Dios y confiar en sus planes. Dijo que el mundo necesita al actual San Juan Diegos para difundir el amor de Dios. Pidió que la gente respondiera al llamado al sacerdocio y la vida religiosa. Para deleite de los sacerdotes en el santuario, un monaguillo levantó la mano.

Al final de la misa, el obispo Burbidge bendijo el gran cuadro de Nuestra Señora de Guadalupe adornado con flores frescas. Luego saludó a los asistentes, incluido un bebé vestido como San Juan Diego.

Astrid Meléndez, feligresa de Nuestra Señora de los Ángeles, llegó vestida con una corona de flores, una blusa de El Salvador y una falda de México. Aunque Meléndez es originaria de El Salvador y dijo: “Nuestra Señora de Guadalupe es la mamá de todo Centroamérica”.

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