Hace poco salió en las noticias que la policía fue llamada a una
tienda porque había un hombre que estaba viviendo delante de las puertas
principales. No era que el hombre era homeless, ni que estaba pidiendo dinero a
las personas que entraban, sino que decidió acampar afuera de Best Buy seis
días antes del Black Friday, para asegurar que podía ser el primero en comprar
la nueva televisión de 50 pulgadas. Con cuanta expectativa se espera el Black
Friday… pero ¿tenemos el mismo entusiasmo por la Navidad?
Es increíble que a mediados de septiembre todo está adornado de
Halloween, al día siguiente de Halloween todo se convierte en Thanksgiving y
sin que tengamos tiempo de digerir el pavo ya todo está decorado de “Navidad”.
Digo “Navidad” porque vemos todo
decorado de colores rojos y verdes, vemos renos, santa, y regalos y
decimos que está “navideño” ¿pero el
niño Jesús donde esta? ¿Como podemos hablar de la Navidad sin Jesús? Sería como
preparar una fiesta para un gran amigo, pero nos enfocamos tanto en la
decoración y los regalos que cuando viene el amigo ya no hay lugar para El. ¡No
nos dejemos robar la Navidad!
El Adviento no es el tiempo de preparación de una lista de
regalos para personas que no cumplen años, sino es el tiempo de preparación
para el verdadero cumpleañero y merecedor de toda nuestra atención. No dejemos
que la locura de esta época tan consumista nos robe la atención del milagro de
Dios. Es interesante que Dios, El creador, el Todo Poderoso, el Rey de Reyes
cuando pensó que le podía dar como regalo de amor al mundo, no mando oro, ni
plata ni bienes materiales, sino que se entregó a sí mismo. Pudiendo ser rico
eligió conscientemente la pobreza para que no lo buscáramos por las cosas que
nos pudiera dar, sino que lo buscáramos por sí mismo. Que contraste tan grande
con nosotros que para expresar amor siempre buscamos regalar cosas materiales,
en vez de regalar nuestro tiempo y presencia a las personas que más amamos.
Antes de pensar en comprar regalos a los demás pensemos si le
tenemos regalos a quien es el centro de la celebración de Navidad. ¿Que le vas
a dar a Jesús? Los reyes magos se prepararon por meses y viajaron largas
distancias para traerle los tres regalos a Jesús. ¿Y tú? ¿Cómo te has
preparado? ¿Que recorrido habrás hecho durante adviento para darle tu regalo a
Jesús? Les propongo cinco ideas para poder vivir el Adviento al máximo y no
dejarte robar su significado por el comercio desenfrenado.
1 — Los reyes trajeron tres regalos al niño Jesús. ¿Porque no te
propones tres cosas que hacer con tu familia en Navidad para mostrarle a Jesús
que lo aman y que Él es realmente el centro de la navidad?.
2 — Como familia elijan un día durante la semana donde se reúnen
para leer el evangelio del domingo siguiente. Los pequeños pueden escuchar el
evangelio y hacer un dibujo y los más grandes pueden hablar sobre lo que les
llama la atención de la lectura. Luego propónganse una cosa concreta que van a
hacer como familia para vivir durante esa semana lo que dice el evangelio. De
esta manera cuando vayan a misa ese domingo su familia está preparada para
vivir la plenamente la palabra de Dios.
3 — Antes de comprar un regalo a tus hijos, amigos, o familiares
hazte dos preguntas:
a. — ¿Este regalo va a
acercar a esta persona a Dios o ayudarle a encontrar el significado de la
Navidad y del amor de Dios?
b. —¿Si esta fuera la última Navidad que yo tuviera con esta
persona que le regalaría? Este año proponte regalar “experiencias “es decir,
citas o actividades donde puedan pasar tiempo calidad como familia, en vez de
comprar cosas materiales.
4 — El 25 de diciembre compren un pastel, inviten a su familia,
amigos y vecinos y cántenle feliz cumpleaños al niño Jesús. Antes de picar y comer el pastel cada uno
puede decir la importancia que tiene Jesús en su vida.
5 — Además de lo aquí descrito continúen o empiecen sus
tradiciones familiares. Si ya su familia tiene tradiciones navideñas centradas
en Jesús, continúen haciéndolo e inviten a otras familias que los acompañe. Si
no tiene tradiciones establecidas elijan una nueva tradición, puede ser la
corona de Adviento o las posadas, y vívanla auténticamente y así cada año van
agregando actividades que les ayude a vivir un Adviento y una Navidad
auténtica.
Briceño, una virgen consagrada, se dedica a la evangelización a través de su ministerio happyfeetministries.com.